Quemar más grasas en invierno, ¿es posible?

Los seres humanos tienen dos tipos principales de tejido adiposo o tejido graso; el tejido adiposo blanco (WAT- por sus siglas en inglés) y el tejido adiposo marrón o multilocular (conocido como BAT). Ambos tienen funciones muy distintas:

  • Tejido adiposo blanco – Almacena energía química (exceso de energía de los alimentos sin usar)
  • Tejido adiposo marrón – Libera calor a través del consumo de energía

Cuando somos más jóvenes, nuestros depósitos de tejido adiposo marrón están muy altos y representan casi el 5% de nuestro peso. Este es un mecanismo evolutivo para evitar la hipotermia en los bebés que no son capaces de temblar de manera adecuada o alejarse del frío por sí mismos. A medida que envejecemos, sin embargo, nuestros niveles de BAT caen dramáticamente formando menos del 0,4% del peso corporal. Lo que es una pena, teniendo en cuenta que sólo 63g de BAT trabajando a plena capacidad puede quemar hasta 4.1kg de WAT en un año. ¿Te imaginas perder 4.1kg sin tener que entrenar o hacer dieta?

Lo que es aún más interesante es la evidencia de las “células brillantes” también conocidas como células beige o células marrones inducibles. Estas son básicamente células de tejido adiposo blanco que se pueden convertir en células de tejido adiposo marrón.

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Una persona promedio tiene entre 20-27kgs de tejido adiposo blanco, incluso un pequeño aumento de la tasa de conversión termogénica puede suponer un verdadero impacto en el metabolismo de las grasas.

Por esto, con una intensa investigación se ha estado buscando maneras y terapias para aumentar esta conversión. Éstos son algunos de los moderadores clave que pueden, con diferentes capacidades, crear tejido adiposo beige:

  • Exposición al frío
  • Nicotina
  • Cafeína
  • Viagra
  • Ejercicio
  • Lactato
  • Berberina
  • Capsaicina
  • Fucoxantina
  • Soja negra
  • Resveratrol
  • Restricción de metionina
  • Arginina
  • Cuerpos cetónicos
  • Nitratos
  • Aceite de oliva
  • Ácidos grasos poliinsaturados

Aplicaciones prácticas

Como se mencionó anteriormente, los tratamientos anteriores para inducir la conversión de grasas blancas (WAT) a marrones (BAT) se diferencia en su eficacia en que aún están en sus comienzos en la investigación; mayoría de los cuales se limitan a los estudios in vitro y en animales.

La ciencia está definitivamente creciendo y aunque algunas de las sugerencias anteriores ya son ingredientes populares en suplementos quemagrasas como la cafeína, la capsaicina y el resveratrol. Si todo lo demás falla, sin embargo, un rápido paseo en clima frío o una sesión de ejercicio decente seguido de una ducha fría podría hacer el truco.

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